martes, 28 de octubre de 2014

Reflexiones de Jack la Piedra: el último fotograma.

“- Yo quiero ser madre. 
- Pero, eso es imposible. Eres un hombre, no tienes matriz. 
- ¡No me oprimas! 
- Está bien, lucharemos también por defender tu legítimo derecho a querer ser madre aunque sea físicamente imposible. 
- ¿De qué sirve defender su derecho a ser madre sino puede parir?
- Es un símbolo de nuestra lucha contra la opresión.
- Es un símbolo de su lucha contra la realidad.”
La vida de Brian (Terry Jones, 1979)

Hola. Mi nombre es Jack, Jack Jones, aunque todos mis amigos me llaman Jack la piedra. Seguramente os sonara mi nombre, ya que mi padre fue famoso halla por los 90. Al igual que yo, a mi padre le llamaban Jack la piedra[1], y –al igual que yo, es un tío tranquilo y solitario.
Foto de carnet de Jack

Como parte integrante de A.(R)E.A. -Acción (R)Evolucionaria Arqueológica, me toca reflexionar sobre diferentes temas, y en eso me hallo ahora. Llevaba tiempo sin escribir, y eso se nota. Intentando retomar la rutina de escribir y decir cosas, te encuentras siempre diferentes frases o ideas que te hacen plantearte diferentes visiones, y una de esas visiones, desgraciadamente he observado hace muy poco.
Pero antes de empezar a tirar mierda contra el ventilador, pongámonos en situación, con unas cuantas ideas prestadas, las cuales solo podemos aplaudirlas.  

“…(…)… Si el objetivo del arqueólogo o arqueóloga “militante” es la trasformación, y no únicamente la interpretación, los instrumentos serán todos aquellos que se hayan demostrado trasformadores de la realidad social. Solo mediante la practica arqueológica social podremos hacer de la arqueología una ciencia verdaderamente social[2]
“La arqueología como practica investigadora, puede influir, desempeñar un papel activo en sus diferentes realidades. Esta es una máxima que ha estado presente y seguirá estándolo en muchos agentes de la investigación arqueológica. Sin embargo, es preciso desarrollar un tratamiento específico en que se aborde algunas de las posibles maneras de realizarlas…(…)… Por eso animamos a que sea criticado constructivamente y a que aquellos que sientan la compulsión de intervenir activa y subversivamente en la realidad, lo hagan cuanto antes”.[3]
“…(…)…una arqueología comprometida, entendida como teoría histórica y practica social subversivas, puede proporcionar una perspectiva crítica fundamental a diferentes grupos, agentes y movimientos sociales para construir un mundo sin jerarquías ni explotación social”.[4]

Sin pensamos en parámetros historicistas, “…(…)…lo que destaca de la cultura material es su grado de complejidad tecnológica para la cada vez mayor domesticación del medio. …(…)… Cuanto mayor complejidad estética, tal y como hoy es entendida, mayor desarrollo social y cultural se interpreta que posee un grupo humano”[5], deberíamos tener un complejo desarrollo social y cultural. Sin embargo, podemos decir que hemos sido alienados por nuestra propia cultura material; es más, incluso por una cultura material que rara vez será participe –o parte- de ella. 
Nosotros -a la par que FALQUINA et alii (2006. Pp.28)- abogamos por la alternativa de Pluciennik[6], cuando afirma que “…(…)…una práctica arqueológica realmente comprometida debe asentarse en una ética de la responsabilidad, es decir, prestando atención a los aspectos concretos de las problemáticas de los grupos y comunidades con las que se trabaja y/o de las que se participa, antes que en una ética de la intención, que presta atención a problemáticas generales que suelen traducirse en códigos deontológico normativos que pasan por alto los conflictos específicos y muchas veces imponen prácticas ineficaces al no responder a las necesidades reales del contexto en el que se colabora.”

En meses anteriores, en una de nuestra entradas[7], A.(R)E.A decía:
La utilización fuera de contexto de estos restos, las constantes reformas en los centros históricos,  a lo único que llevan es a una impersonalidad de las propias ciudades[8].  Y como todos los caminos llevan a Roma, pues realizamos una solución de continuidad para hablar, no de la musealización de restos en las ciudades, sino de la propia impersonalización de las mismas, alejadas del burgo, cuna del hormigón menos almado y alejado de un entorno verde y vivo. No decimos que tuviera que haber más arts topiary en las ciudades –aunque sería una cosa que nos encantaría- sino que lo que decimos es que odiamos a los arquitectos municipales y sus ideas novedosas de minimalismo, quitando zonas verdes y calles con encanto, para dejar unos grandes espacios hormigonados –salteado con unos cuantos arbolillos autóctonos y unos bancos de diseño, of course- y calles peatonales que buscan ser motor de motivación del consumo. Todo muy minimal,… En algunos casos quedan bonitas,… insulsas pero bonitas,.. un espacio abierto siempre es un espacio abierto,….pero no se preocupen ustedes, que si vemos que tal, pues ponemos una terraza –la gente mayor de la ciudad dice que antes podías pasear por el casco histórico saltando de terraza en terraza; la gente más joven dice que ahora también lo puedes hacer no solo por el casco histórico, sino por casi todas las calles que tengan menos de dos metros de acera,…- o varias, ya veremos, con sus estufas y sombrillas, y unas plantas de plástico para dar un poco de color,…. La terrazas gustan mucho,..o no.”

Bien, pues estas ideas no estaban muy desencaminadas por lo que estuvimos leyendo, ya que FALQUINA et alii (2006) ya decían cosas parecidas como estas hace uno años,…..Y nosotros sin enterarnos,… sabemos que vamos retrasados con nuestras lecturas, pero que curioso que lleguemos a las mismas conclusiones desde parámetros diferentes,…

“La construcción de obras públicas e infraestructuras es un dinamizador fundamental de la economía, porque moviliza enormes cantidades de capital, mediante una compleja red de empresas y partidos políticos, y supone la integración de la población en un mercado urbano basado en los bienes de consumo y la movilización de trabajadores. Expresado de un modo muy simple, la ciudad precisa profundas modificaciones urbanísticas para proveerse de aceras más anchas en las que ubicar las terrazas por las que el ayuntamiento pedirá licencias; autopistas y redes de transportes para hacer llegar de un modo más rápido, concentrado y eficaz a diversos trabajadores en tiempo de trabajo y a consumidores en tiempo de ocio; espacios peatonales para facilitar un acceso relajado, aunque masivo, a escaparates, comercios, cines, teatros y museos; edificios de varias alturas, con profundas cocheras y hermosas fachadas, en los que alojar a jóvenes emprendedores con un elevado poder adquisitivo; barrios en los que recluir a amplias masas de una población proletarizada, tanto inmigrante (extranjera y nacional) como local, con servicios muy deficientes, etcétera…(…)… En este contexto, los arqueólogos podemos rechazar la dinámica general resistiéndonos a la dinámica particular que se impone a las intervenciones arqueológicas, que no es otra que la de servir de mero trámite a la consecución de los intereses especulativos de las empresas constructoras y sus secuaces. Esto debe conducir a un debate radical en el seno de la comunidad arqueológica, pero, de igual modo, a un trabajo cotidiano en comunidades urbanas concretas. Nuestro trabajo, en este último sentido, radica en la necesidad de contribuir a la concienciación, propia y de los agentes y grupos con los que convivimos, con respecto a las dinámicas soterradas de dominación…(…). Desde un punto de vista arqueológico, es interesante constatar cómo están cambiando las plazas y calles de grandes ciudades como Madrid, pues donde antes había bancos y tierra que permitían el disfrute público y los juegos de los niños, ahora encontramos superficies lisas de granito sin árboles que den sombra en verano ni bancos en los que poder conversar…(…). Con ello, se fomenta el desarrollo del sector terciario en el centro de la ciudad, convirtiendo el centro histórico en un gran foco para el consumo y perdiendo además todo su valor cultural.”[9]

Bien, estas palabras, unidas a la visión que hemos tenido, nos ha producido una desilusión moral. Cuando en post-it pasados hablamos sobre la construcción de las escaleras de la Plaza de Juan XXIII y de la plaza Anaya[10], decíamos que una ciudad se construye a base de tiempo y espacios, pero observamos como últimamente, esto último se lo toman al pie -derecho[11]- de la letra la gran mayoría de los arquitectos –municipales o no- adoradores de Satan[12], que ven en las enseñanzas de su profeta, Le Corbusier, el dogma de fe sobre el cómo deshumanizar las ciudades. Incluso hay algunos que pondrían pivotes en mitad de las calles, para por si acaso; Y así, mientras esperamos salir o no, o volver a entrar en crisis, recesión o feudalismo, pues se podrían utilizar para sujetar los toldos de las simpáticas terrazas Malthusianas que aparecen por nuestras aceras.

Solo quiero hablar de esos edificios o lugares –sitios, cosas,..- que no son tan bonitos y que tampoco los enseñan la secta esa de los guias, pero que son parte de nuestro pasado tanto o más que las construcciones grandilocuentes, porque han estado más cercanos de lo que parece.

Si tuviéramos que hablar etimológicamente de este tema podríamos decir que es una parte de la Arqueología industrial, fechable –por poner una época- a partir de la guerra de la independencia, por ser una fecha clave para nuestra ciudad, ya que durante la guerra, aproximadamente un 60 % de los edificios singulares de la ciudad pasan a una mejor –peor- vida. Se trataría por tanto de aquellas huellas que conforman el espacio urbano desde ese momento en el que caben edificios/edificaciones a otros elementos muebles, físicos, materiales como inmateriales. Esta etnografía urbana estaría hecha de los restos de nuestro paso en el camino urbano, llegando casi hasta los momentos actuales, hasta nuestro pasado vivido, y son –como no podía ser de otra manera- de naturaleza variada. Por poner un ejemplo, en este totum revolutum entrarían las pintadas madrileñas de Muelle[13], que en nuestra ciudad tendría el paralelismo con la pintada/logo/marca registrada de MARIA[14], la mítica discoteca/tienda de discos/tienda de comics/lugar de reunión, etc,…

Mítica cabecera.
Incluso esa huella tendría cabida en este cajón desastre. Multitud de ejemplos podríamos poner de casi todas las épocas, uniendo recuerdos y vivencias de vivos, muertos y extraños, vividas, conocidas, simplemente encontradas o recordadas por nosotros, por otros o impertérritas ante el paso del tiempo.
Son pocos los edificios que permanecen intactos, y no digo al exterior, que “suelen” respetar las fachadas aunque luego se haya hecho un vaciado estructural perdiendo no ya la fisionomía de la casa castellana, sino la propia idiosincrasia de los espacios habitados.  

En el mundo arquitectónico, existen edificios que no se deben –ni deberían- tocar. Es como si viviendo en Barcelona, nos compramos un apartamento en la casa Milá –La Pedrera- con balconada, y proponernos cerrar ese balcón, que seguro que con la cercanía al mar tendrá una humedad,… Seria una absurda barbaridad, ¿Verdad?;  o por poner un ejemplo de nuestra ciudad, sería como hacer una terraza en la techumbre de la Plaza Mayor,…ehhh, bueno, este a lo mejor no es el mejor ejemplo,...pero, volviendo al mensaje principal, la perdida de espacios, de lugares, de retazos del pasado por parte de la comunidad, hace que poco a poco, esta realidad social, se camufle entre el hormigón menos almado.

Son pocas las películas que se han rodado en alguna ciudad –en la nuestra se nos viene a la cabeza las dos superproducciones hollywodienses que se rodaron en conmemoración del 5º centenario de la conquista y aniquilación de los pueblos indígenas- en la que una urbe haya sido la gran protagonista; La excepción la marcaria Woody Allen y su complejo de edipo hacia la gran manzana[15].  

De vez en cuando, nos acordamos de algunos de los directores/cineastas que ha dado la ciudad –aunque antes se acordara la gente del pasado charro de Arbeloa, aunque rara vez haya pisado la ciudad- y nos viene a la mente el gran Basilio Martin Patino, cuyo único “reconocimiento” en la ciudad es la colección permanente que se puede ver en la filmoteca de Castilla y León.
Bien, pero no entremos en reconocimientos fatuos, sino que nos centremos en la crítica/exposición que queríamos hacer.

Existe una película que ensalza de una manera maravillosa a la penumbra que envuelve a esta ciudad, ensalzando la crítica al inmovilismo, dejadez, caciquismo y pasotismo de esta señora de gran nobleza a la que le huelen los pies[16].
En la película de Patino, -excelente en la realización para los amantes [sic] de la arquitectura- existen escenas que son verdaderos palimpsestos  de relatos, espacios olvidados y lugares emblemáticos.
Pues bien, el último fotograma ha sido velado.
Al final de la película, cuando nuestro protagonista acata –o sucumbe- al tiempo vivido y a la moral impuesta, camina con su progenitor.

Fotograma de la película.
Pues bien, mientras camina por aquella ciudad anclada en el tiempo pretérito pluscuamperfecto de una belleza singular, va pasando ante nuestros ojos diferentes escenas, que podíamos vivir en primera persona, que podríamos contemplar en 3D, podríamos sentirnos parte de la película, como le pasaba al protagonista de la –infumable- Last Action Hero[17]. Podríamos pararnos, hacernos una foto, ponerle un puto filtro de b/n o sepia que tenemos todos nosotros en nuestros teléfonos y colgarlo en las redes sociales y sentirnos especiales, que cojones,…pero, ya no, tendremos que hacerles una foto a los pies en la playa,  vaya toalla,…
Si acabamos con las huellas no sabremos de dónde venimos, y no sabremos donde vamos, y estaremos dejando las ciudades impersonales y asépticas que pierden toda la belleza que tuvieron en su día.
Sabemos que es difícil dejar paso al progreso, pero nos habría gustado que en lugar donde estaba la mítica Librería Aniceto[18] –conocida y admirada- hubiera o hubiese una placa que la recordara como parte integrante del comercio salmantino, incluso nos habría gustado que no hubieran cambiado la fachada, o que hubieren conservado la cartelería de época, aunque el negocio que lo sustituyese poco o nada tuviera que ver con el contenido del contenedor, pero sería un grato recuerdo. Pues bien, el sucesor de A. Mediavilla, Ricardo J. Ruano, de la Ferreteria nº 6 tampoco puede decirlo.

Imagen de una época.
El último fotograma quasioriginal de la mítica obra de Basilio, aquella postal a Berta que quedaba impertérrito ha sido desmantelado y pintado de,…¿rosa? No estamos diciendo que debiera dejar per secula, pero un poquito más de delicadeza se podría haber tenido.

Fotograma con filtro de Instagram.
¿Se debió tirar aquel mítico edificio de alojamiento? ¿Se debe permitir el cambio de fachada en pos de un nuevo y fructífero negocio en espacios singulares que son una tentazión? ¿Se debería cambiar el nombre de ciertas vías que son fruto de nuestro pasado mas cruel? ¿Se deben perder ciertos espacios que están en la memoria visual de la ciudad? Pues es lo que deberíamos debatir, lo malo es cuando no se hace, ni se debate, ni se critica, ni se explica, ni se expone, ni os interesa, ni nos molesta,…
A.(R)E.A. -.Acción (R)Evolucionaria Arqueológica.-




[1] Nuestro pequeño homenaje al comic de culto Mondo Lirondo (Camaleón ediciones 1993-1997) ideado por la gente de La Penya (Albert Monteys, Álex Fito, Jose Miguel Álvarez e Ismael Ferrer). Nuestro personaje nace de aquellas páginas -aunque no sabemos si de la relación que mantuvo Jack la piedra con María José la corriente eléctrica. Creemos –pensamos más bien- que es el fruto de una relación homo-erótica que mantuvo con Jeremías el pez explorador, en una de sus escapadas a las Herriko-saunas de las vascongadas,….aunque este idilio no ha sido confirmado por fuentes literarias ni  fidedignas.
[2] TEJERIZO GARCIA, Carlos; (2011): Arqueología y cine: distorsiones de una ciencia y una profesión. En VV.AA; (2011): El futuro del pasado, nº 2 Pp.389-406.
[3] FALQUINA APARICIO, A; MARIN SUAREZ, C; ROLLAND CALVO, J; Grupo Arqueológico Tierra de nadie; (2006): Arqueología y práctica política. Reflexión y acción en el mundo cambiante. Arqueoweb 8(1) abril 2006. <http://pendientedemigracion.ucm.es/info/arqueoweb/pdf/8-1/falquina.pdf>
[4] FALQUINA APARICIO, A; MARIN SUAREZ, C; ROLLAND CALVO, J; Grupo Arqueológico Tierra de nadie; (2006): Arqueología y práctica política. Reflexión y acción en el mundo cambiante. Pp.11. Arqueoweb 8(1) abril 2006. <http://pendientedemigracion.ucm.es/info/arqueoweb/pdf/8-1/falquina.pdf>
[5] FALQUINA APARICIO, A; MARIN SUAREZ, C; ROLLAND CALVO, J; Grupo Arqueológico Tierra de nadie; (2006): Arqueología y práctica política. Reflexión y acción en el mundo cambiante. Pp.11. Arqueoweb 8(1) abril 2006. <http://pendientedemigracion.ucm.es/info/arqueoweb/pdf/8-1/falquina.pdf>
[6] PLUCIENNIK, M. (2001): “The responsabilities of archaeologists” en M. Pluciennik (ed.): The responsabilities of archaeologists. Archaeology and Ethics. BAR International Series 981, Oxford.
[7] http://arqueoart.blogspot.com.es/2014/02/me-encanta-el-olor-napalm-por-la-manana.html
[8] http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/01/05/actualidad/1388947168_824504.html
[9] FALQUINA APARICIO, A; MARIN SUAREZ, C; ROLLAND CALVO, J; Grupo Arqueológico Tierra de nadie; (2006): Arqueología y práctica política. Reflexión y acción en el mundo cambiante. Arqueoweb 8(1) abril 2006. <http://pendientedemigracion.ucm.es/info/arqueoweb/pdf/8-1/falquina.pdf>
[10] <http://arqueoart.blogspot.com.es/2014/03/la-historia-al-igual-que-la-escritura.html>
[11] Chiste arquitectónico.
[12] SEMS
[14] A.K.A.: Maria Sangrienta.
[15] A.K.A.: Nueva York.
[16] (LOPEZ SANTAMARIA, Jesus, 1986)
[17] Si se quiere tener una experiencia de como seria entrar en una película, ver The kentucky fried Movie (John Landis, 1977)
[18] <http://macgo.wordpress.com/2011/02/13/adios-a-la-libreria-aniceto/>

lunes, 6 de octubre de 2014

sOpA´14: Café solo con hielo –y limón: Reflexiones desde la barra de un bar.

Reflexiones desde la barra de un bar.

Hace casi una semana y nos sigue repitiendo la sopa. Para nosotros –nos gusta utilizar el plural mayestático, hace que todo parezca más amplio- han sido literalmente nuestras vacaciones. Tenemos la misma sensación que el año pasado, volver con ideas nuevas, volver a ver a amigos, conocidos a los que seguimos en la redes y admiramos, y otra gente que hemos descubierto. Nos habría gustado haber visto a la gente con la que compartimos el año pasado experiencias, charlas, opiniones y risas. Ellos también son parte de este guiso y serán parte, ya que nos marcó a todos de una u otra manera.

Nos ha encantado la sensación y la experiencia. ¿Que podemos decir? Pues que hemos disfrutado difundiendo nuestras ideas -raras ya de por sí;  realizando talleres y hablando hasta altas horas incestuosas sobre estos temas que nos gustan; Hemos disfrutado como quinceañeras escuchando a gente de la que tenemos que aprender mucho; Seguimos observando un abismo brutal entre lo que se hace en diferentes partes de la P.I. y fai un sol de carallo; Hay gente capaz de sintetizar en un dibujo todo un compendio de ideas, haciendo asequible y entendible cualquier concepto; Seguimos intentando entender los temas de procomún /bicomún, pero hay peña que te lo explica de una forma acojonante; Latinoamerica se mueve a otro ritmo,…que engancha; la idea de la worktable debería implantarse como materia troncal de todo tipo de reuniones; La fe mueve pirámides; Patrimonio desconocido que se re-encuentra con uno mismo;  Estratigrafía en vanos de entrada visualmente evocadores; Arte rupestre en la solapa; Musealización desde la tela (de una araña); iniciativas que nacieron hace un año, ven la luz en el siguiente; propuestas que toman la calle –o da Rua;  Escolares que disfrutan realizando oficios artesanos –tanto o más que los mayores; (Por cierto, nunca me había dado cuenta de que el patrimonio esta patriarcalizado[1]); Caballitos que se mueven geográficamente –para moverlo temporalmente, recordad que hay que conseguir una energía de 1,21 jigovatios; Viaje a los años 20 de la mano de una hermosura de Fidias; Proyectos que hablan de otras realidades, Otras visiones desde un mundo abstracto,…
Dejemos de contarnos proyectos y de matizar conclusiones, y difundámoslas desde el momento de creación de las mismas e implicándonos en su desarrollo, buscando una realidad patrimonial social y pública.
No soy objetivo, a nosotros nos conquistaron el año pasado. Lamento no poder compartir más momentos como este, lamento estar sumido endogámicamente, que poco a poco va limando sueños y esperanzas; lamento que el próximo sea en un lugar tan lejano para nosotros, ya que no creemos que tengamos stipendium para permitirnos el viaje,….
Pensemos.  Ya estamos pensando en realizar algo al unísono por estas latitudes, me da igual que sea sopa, caldero, plato combinado, ronda de cañas o café torero, mientras haya debate, charlas y risas nos vale. Elegid un lugar, y decid sitio y vestimenta, y Arqueoart & A.(R)E.A allí estarán, embriagándose.
«¡Es hora de emborracharse! Para no ser esclavos y mártires del Tiempo, embriagaos, embriagaos sin cesar. De vino, de poesía o de virtud; de lo que queráis.»
Charles Baudelaire.




[1] Mi patrimonio esta patriarcalizado. ¿Quién lo des-patriarcalizará? El despatriarcalizador que lo despatrialcalice, buen despatriarcalizador será.

jueves, 1 de mayo de 2014

La Belleza de lo cotidiano.

“Cada cosa tiene su belleza, pero no todos pueden verlo” 
Confucio
La belleza de lo cotidiano.

Como siempre que llegan estas fechas, la gente de A.(R)E.A. suele aprovechar para desconectar, ponerse al día de lecturas –si les dejan- e irse al campo a disfrutar del silencio, ya que al no tener este colectivo fervor religioso, estos días de recogimiento espiritual nos sobrecogen. Como no nos gustan esta fechas, pues no las seguimos, no las vemos y nos da un poco igual lo que pase durante esos días.

Al ponernos al día con las lecturas -hecho este que deberíamos hacer cada dos semanas- pudimos leer ciertas ideas que llevan una larga temporada rondando por todos los debates y charlas en las que tenemos la oportunidad de tener. Si, queridos lectores, volvemos a preguntarnos por el futuro de la arqueología? O por la llegada de los romanos a Canarias?[1] Que Pompeya se habrá encontrado en estos días?[2] No, pero algo parecido, como son las trasformaciones acaecidas en nuestro horizonte, y la proliferación de talleres, no solo de arqueología experimental, sino de ámbito “didáctico”, donde muchas personas, o parafraseando a MOYA, “…Un buen número de estas personas provenían de la arqueología comercial, sector que practicamente ha contemplado su propia desmantelación en los últimos años como producto de la apuesta neoliberal de este ámbito profesional por el mercado inmobiliario”[3]se han pasado a realizar una serie de actividades sin tener ni la menor idea del público al que van dinamizar. Curiosamente, esta apreciación nuestra, va pareja a la que observó nuestro amigo José, sobre otro de nuestros temas fetiches, la socialización del Patrimonio.

“El desmoronamiento de este nicho de empleo ha generado una reconversión de numerosas empresas y trabajadores/as, que han visto un foco de recursos económicos en esto de la «socialización del Patrimonio» y ahora enfocan toda su actividad empresarial en esta dirección sin reflexionar sobre lo que realmente significa tal cosa. No me parece mal esta reformulación profesional, pero si creo que al trabajar con vecinas/os, este cambio debe hacerse desde un punto de vista comprometido, honesto y respetuoso. Los/as profesionales que trabajan con el Patrimonio no deben crear proyectos en los núcleos rurales creando falsas expectativas económicas y sociales y después abandonar sus proyectos, con lo que ello conlleva. Basta con que prestemos atención a los numerosos trabajos desarrollados durante la primera década del siglo XXI que han sido financiados con dinero europeo –especialmente fondos Leader– centrados en la excavación, restauración y creación de centros de interpretación de yacimientos arqueológicos. Gran parte de estos proyectos han quedado abandonados. Esta situación viene motivada, entre otros factores, por la incapacidad de muchos ayuntamientos de las zonas rurales para asumir los costes a largo plazo que motivaban este tipo de proyectos. Si queremos ser técnicos del Patrimonio sin ningún tipo de implicación social podemos hacerlo, nadie obliga a lo contrario. Pero si se pretende implicar a la comunidad hay que hacerlo de manera honesta. Y lo que si se transmitió de algunas de las charlas es que en determinados casos, efectivamente, se buscan subvenciones de manera indiscriminada y sin contemplar las implicaciones que estos proyectos tienen para con las comunidades locales”.[4]

Como me gusta compartir ideas, y más si estas ideas las comparto [sic]. Y si, igual que opina SEÑORAN sobre esto de la socialización, podemos extrapolarlo al tema de la didáctica en Patrimonio, aunque a nosotros no nos gusta hablar de didáctica, sino de Interpretación Patrimonial Didáctica.

En este sentido, rescatamos las palabras de Rodriguez Temiño, que nos dejó un día cualquiera en una red social. Parece un simple comentario –que lo es- pero que incide de manera brutal en un tema, del que deberíamos entrar a comentarlo en siguientes entradas al blog.  
 
“Didáctica de la arqueología y machismo.
Lo que empezó como una sospecha, afianzada en algunos comentarios con personas implicadas en actividades didácticas informales (excluyo toda la educación escolar) relacionadas con la arqueología o el patrimonio arqueológico, creo que podría externalizarse en un debate. Me parece indiscutible que este tipo de actividades está fuertemente caracterizado por un componente de género, es decir hay más mujeres que hombres dedicadas a trabajar estos temas con niños. En sí mismo, este dato no tiene por qué ser negativo ni positivo, pero el problema es que esconde actitudes claramente machistas.
Todo parte de una infravaloración de estas actividades frente a otras con una supuesta mayor carga de protagonismo (dirección de excavaciones, realización de informes...). Para estas últimas, la preparación y la competencia profesional parece indiscutible, mientras que "estar con niños" no precisa (según esta visión) ningún componente intelectual; basta con el tradicional "instinto maternal".
Esta visión, subyacente e inconsciente, no solo tiene un componente machista, sino que también adolece de una concepción errónea y nefasta de la educación informal y revela que profesionalmente todavía no estamos a la altura de las exigencias sociales. 
Esta es mi opinión, claro. El hecho de que en el ámbito teórico de la educación informal aplicada al patrimonio y a la arqueología haya hombres, no creo que afecte a mis conclusiones, ya que se trata de personas que se dedican a la teorización y no a la práctica y provienen del ámbito universitario y museístico. Se admiten otros puntos de vista”[5].

En estas líneas no vamos a entrar a pensar si verdaderamente hay una cuestión de género en la didáctica patrimonial, pero las palabras de Ignacio nos ha hecho que esta pregunta sobrevuele nuestras próximas apreciaciones de este mundo. Bien, después de leer a Ignacio -que siempre nos hace pensar digámoslo de paso- nos quedamos con unas palabras, destacando infravalorado y concepción nefasta de la educación informal. No podemos estar más de acuerdo con esta visión, e incluso creemos que hace falta más preparación para andar con niñ@s que dirigir proyectos. A las pruebas me remito. Solo hay que ir a un servicio oficial de patrimonio de cualquier Junta, Xunta, Generalitat u organismo oficial para darnos cuenta del nivel de los informes[6]. Hay informes y memorias que deberíamos reescribir, repensar o directamente quemar.

Pero bueno, volviendo a nuestro tema del post, que no era otro de hacer actividades, y en este caso, basándonos en la belleza de lo cotidiano, decidimos plantear un proyecto que nos lleva rondando bastante tiempo en nuestras cabezas, y no es otro que hacer talleres didácticos pero basándonos en concepciones teóricas, acertadas, empíricas, lúdicas y coherentes, con una base adecuada y queriendo trasmitir un conocimiento, y no edulcorando la actividad[7].  Por tanto, nos es grato enseñaros lo que pudimos hacer en una semana que pasamos en el campito, con la ayuda de nuestras familias y con las notas y ayudas tomadas de amigos y colegas[8]. Esto no deja de ser una prueba de una actividad, la cual la tendremos que cambiar, adecuar, flexibilizar para poder realizarla con público, tanto púber como personas adultas. El taller que nos planteamos es la de realizar pintura sobre tabla, a la manera más medieval -¿artesana?- posible. Nuestra intención era buscar materiales cotidianos, accesibles, y realizar una práctica que después la podamos extrapolar a un contexto concreto, enseñando y acercando un patrimonio olvidado o sencillamente, no expuesto ni explicado[9].

Los materiales necesarios para ello son muy normales y los podemos conseguir fácilmente. Primeramente una tabla -nos vale cualquiera que tengamos por casa, también nos valen aquellas de los palés de trasporte; cola de conejo, cal apagada, papel de lija, pigmentos naturales, y unos huevos. Bien. Después de conseguir los materiales, buscaremos un lugar donde estar tranquilos y empezar con nuestra dedicación, en la cual invertiremos alrededor de un par de días, o más.

Como primer paso, cogeremos nuestra tabla y la lijaremos de manera profusa, es decir, de manera abundante dejando una superficie lo más lisa posible[10]. Cuando la tengamos, pasaremos a la siguiente acción.

Vista de la tabla después del lijado.

A continuación, pasaremos a darle una primera capa de imprimación a la madera, utilizando la cola de conejo. Nosotros con anterioridad, hicimos nuestra propia cola de conejo[11], despellejando al susodicho animal, dejando salar su piel y cociendo los restos para realizar la cola. Después de varias semanas dejando secar, disponíamos de varios fragmentos de piel[12] y de unas laminillas de cola de conejo natural y artesana. La cola de conejo[13] se consigue cociendo los restos de tendones, piel, órganos inclusive y todos aquellos trozos -que no podamos utilizar para la alimentación- durante un largo periodo de tiempo a fuego lento. Después de cocerlo, la pasta resultante se deja secar a temperatura ambiente sobre algún tipo de molde de plástico, cubitera, etc,….durante el tiempo que creamos conveniente. Al secarse, se crea una lamina que será con la que empezaremos a trabajar.  Si no disponemos de conejo, y no queremos hacer sufrir a ningún animal de forma consciente,  podemos comprar la cola de conejo –en bolas o en laminas- en cualquier tienda de manualidades.


Vista del animal/ Piel desecada/lamina de cola de conejo.

Bien. Ya disponemos de unas cuantas cosas, pero todavía no hemos empezado a hacer nada. Lo primero que tenemos que hacer es hidratar la cola. Para hidratar la cola cogeremos aprox 100 gr. De cola y 220 cc de agua, y lo dejaremos hidratar en frio durante aprox. 24 horas. Utilizar este tiempo de espera para leer un libro.
 

Cola de conejo hidratándose/cola Hidratada.

Después de 24 horas de espera, la cola ya está hidratada, así que es hora de ponerla al baño maría, para obtener cola al uso[14]. Con esta cola al uso, podemos empezar a darle una cuantas capas de imprimación a nuestra tabla. Estas capas puedas darlas de cola al uso sin nada más, o unirla con agua y alcohol en una proporción de 6-3-1. Nosotros se las dimos sin juntarla con nada, variando capa de urdimbre con capa de trama. Le dimos alrededor de 4 capas, dejando secar levemente entre capa y capa. Después de la última nos fumamos un cigarro y esperamos un poco más.
 

Detalle de las capas de imprimación. 

Bueno, pues ya va cogiendo forma esto que estamos haciendo. A continuación tendremos que preparar el yeso/estuco sobre el que dibujaremos, para lo cual necesitamos la cal apagada. Cogeremos parte de nuestra cola al uso y la pondremos al baño maría en una proporción de 1/8, es decir una medida de cola por 8 de agua. Cuando este todo bien mezclado, empezamos a echar cucharadas de cal poco a poco, hasta que no se “moje” mas, y nos quede una especie de yogur. Removemos lentamente en sentido de las agujas de reloj, y si vemos que queda muy blando, echamos alguna cucharada más. Nosotros hemos hecho la prueba con 10 cucharadas de postre sin copete. Es preferible que nos quede primeramente una pasta blanda para darle las primeras capas, y luego ir añadiendo. Lo dejamos al baño maria durante el tiempo que creamos conveniente, y cuando tengamos una pasta parecida al yogur, empezaremos a darle capas a nuestra tabla. (Nosotros hemos realizado esta acción manteniendo la mezcla al fuego.)

Vistas de la pasta

Bien, pues empecemos a darle capas a nuestra tabla. Recordad dar capas intercalando urdimbre y trama, es decir, una vertical y otra horizontal, dejando secar entre capa y capa un tiempo recomendable. Nosotros primeramente dimos como 4 capas en un periodo corto de tiempo y fuimos ensanchando los tramos de imprimación, dando alrededor de 12/14 capas en total.
  

Vistas de imprimación. Primer y segunda; quinta y sexta; novena y décima,…

Hemos decidido dar entre 12 /14 capas de estuco, pero según la madera y la pasta que os resulte, podéis darle más o menos según prefiráis, pero que os quede una superficie de unos 5 mm de grosor, ya que después tenemos que lijar.

A posteriori, habiendo dejado secar la superficie un tiempo indeterminado –nosotros lo dejamos de un día a otro- empezaremos a lijarla. Tener a mano papel de lija de diferentes grosores. Empezad con el más grueso e id lijando con fuerza –si no está bien seco, destrozareis las capas y la lija, palabra de errorista- e id cambiando de grosor de lija según vayáis viendo, terminando eso sí, con las más fina, de manera muy suave, su su suave,.. ya que sobre esa superficie, totalmente plana y lisa es sobre la que dibujaremos nuestro diseño.

Lijado, o lijando,..

Si has llegado hasta este punto, Enhorabuena!!!, tienes una tabla recubierta de yeso la cual esta esperando que la decores, así que dejando a un lado la tabla, nos pondremos con la realización de los pigmentos.

Para los pigmentos, hemos utilizado pigmentos naturales, en este caso uno de color negro, el cual lo hemos juntado con cenizas del mismo color, quedándonos unos polvillos. Si el resultado no es un polvo homogéneo, utiliza un mortero para hacerlo más soluble. Cuando tengas el polvo resultante, y después de limpiar el mortero de tu hermana/madre que has utilizado, quedándote como resultado un polvo negro con un inquietante olor a ajo, empezaremos a dibujar.

Coge la tabla resultante, y con un pequeño trozo de carboncillo –o cualquier otro medio que quieras utilizar- dibuja lo que te venga en gana. Nosotros decidimos hacer una serie de líneas paralelas para poder ver las diferentes capas de pigmentos que le vamos a dar. En cuanto tengas el boceto del dibujo, volveremos a las tareas manuales.

Boceto.

Para la imprimación de nuestro dibujo, hemos utilizado la técnica de pintura de clara de huevo[15], utilizando para ello la clara de un solo huevo y uniéndolo con nuestro polvo de pigmento que anteriormente hemos realizado. El resultado es un pigmento acuoso de fácil imprimación.
 

Madre del huevo/ clara del huevo con pigmentos.

Bien, pues ya tenemos todo lo que necesitamos. Tenemos nuestra tabla con un dibujo bocetado, y nuestro pigmento a la clara de huevo preparado. Pues empezamos a darle capas, dejando secar entre capas, y realizando las pasadas cambiando orientación, tanto de urdimbre como de trama.  Nosotros dimos alrededor de 10 capas de pigmento hasta conseguir el aspecto deseado.
 
 


Capas de pigmentos.

Después de dejar secar y de revisar nuestro dibujo, pudimos observar la obra terminada.

Vista de nuestra pintura sobre tabla.

Bueno, pues aquí está el resultado. Etimologicamente hablando, hemos realizado un dinámica de pintura sobre tabla (¡), de una manera artesanal y con herramientas y materiales muy básicos. 
Como comentamos en líneas anteriores, y más concretamente en la nota a pie de página nº 7, al explicarnos a nosotros -supuestos entendidos en algo- la fabricación, realización y tareas de conservación y/o de mantenimiento, nos dimos cuenta en que, en lo más cotidiano, lo que hacemos todos los días,  lo que parece mas normal para toda esa gente que trabajan/trabajamos/hemos trabajado en un museo o centro de interpretación o lugar con restos, eso que hacemos todos los días, casi de forma mecánica e innata, con una pequeña explicación y las ganas de comunicarlo y enseñarlo, puede convertirse en una forma de divulgación altamente recomendable.  
 

Dinámica realizada. Pintura sobre tabla original / recreación realizada.

Necesitamos y debemos realizar tareas alejadas intrínsecamente de la mercadotecnia del mundo del arte y la cultura. Necesitamos –y ahora más que nunca- divulgar, dinamizar, experimentar y remover conciencias. Si una persona conoce los procesos de fabricación de una obra, no solo de ella, sino del soporte o de los materiales a utilizar, así como los procesos o mecanismos para su conservación o mantenimiento, parte del Binomio del Trébol de la Gestión Cultural[16], estará realizado y, lo más importante, será entendido.

Desde hace una temporada vemos con agrado en nuestra ciudad diferentes iniciativas encaminadas a una difusión y divulgación fuera de las estrechas miras conceptuales. De algunos ya hemos hablado en anteriores entradas al blog, así que para no repetirnos, pondremos a nuestros compañeros y amigos de Espacio Almargen[17], La Malhablada[18], o las iniciativas mediante pictojam´s de Tods Essomos Arte[19], por poner solo unos cuantos…..

El arte y la cultura está en todos los sitios, no solo en los museos, y sus almacenes esconden mil y un “tesoro”. Existen obras que nunca han salido de los fondos en los que se depositaron, y si preguntas por ellas, siempre te dirán frases hechas –de 0,60 según nos comentan Ojete Calor[20]- que no entran en el discurso de la colección, que no se actas para presentar, que estamos esperando a un mejor momento, que el público no las entendería, bla, bla, bla,…..pues hagamos algo nosotros para traducírselas.

Ayudad a A.(R)E.A. a traducir. Estudió en BUP, sus recursos son limitados.

A.(R)E.A. -.Acción (R)Evolucionaria Arqueológica.-





[1] Es que este tema es muy recurrente, ¿Verdad, Pedro Carretero?
[2] http://pabloaparicioweb.blogspot.com.es/2014/04/la-pompeya-de-los-tontos.html
[3] MOYA MALENO, Pedro R.; (2010): Grandezas y miserias de la Arqueología de empresa en la España del siglo XXI. Complutum, Vol. 21 (1): Pp. 12.

[4] SEÑORAN, José Mª.; (2014): Recensiones: I Congreso Internacional sobre Educación y Socialización del Patrimonio en el Medio Rural. (SOPA´13). Pp. 255-258. NAILOS Estudios Interdisciplinares de Arqueología nº 1. Enero 2014. Oviedo.
[5] (RODRIGUEZ TEMIÑO, 2014). Cojo tu testigo, Ignacio, y A.(R)E.A. hablará sobre ello. Seguro.
[6] Algo diré de esto en la comunicación del JIA14. < http://jia2014.blogspot.com.es/p/programa-completo.html>
[7] Para que la práctica fuera lo más fiable posible, utilizamos como  manual el libro de DOERNER, Max; (1921): Los materiales de Pintura y su empleo en el Arte. Barcelona. Ed. Reverte. S.A (5ª Ed. 1994). Seguimos casi al pie de la letra las indicaciones que este autor señala.
[8] Aquí queremos agradecer la ayuda de Paula Joaristi, restauradora del Museo de Salamanca, que nos ayudó con la creación de esta dinámica y esperamos poder adecuarlo y realizarlo en algún sitio. No puedo estarle mas agradecido por su charlas y sus respuestas a mis singulares preguntas. Con todo lo que conlleva trabajar en esos zulos de restauración que tienen nuestros museos provinciales, supongo que “mis cosas” son como un soplo de aire fresco,.. -aunque produzca corriente. Gracias reina!!!!
[9] En este contexto,  con la ayuda de la mencionada restauradora, pudimos observar en el propio Museo de Salamanca, durante las tareas de limpieza del techo de una de las salas, < http://www.turismocastillayleon.com/cm/turcyl/tkContent?pgseed=1077780623333&idContent=5492> se encontraron una serie de piezas que no habían sido colocadas en el techo, y las cuales estaban siendo conservadas por el servicio de Restauración del propio museo. Al interesarnos por ellas, -las cuales tienen unos dibujos de leones, castillos y motivos florales espectaculares- el servicio de restauración del Museo nos explicó la forma, el proceso y la formación de las citadas tablas. En ese momento, emocionado ante las explicaciones que no estaban dando, decidimos que teníamos que hacer algo para enseñar esta parte de nuestro pasado.
[10] Esta primera parte podemos hacerla de manera industrial, es decir, con medios mecánicos o utilizando medios tradicionales de carpintería. Si nos decidimos por piezas de palés, realizar esta acción varias veces para obtener una superficie de trabajo lo más limpia de impurezas posible. El palé es el nuevo negro.
[11] Ningún animal sufrió en la realización de esta dinámica.
[12] Para la desecación de la piel, intentamos hacerla de la manera más natural posible. Hicimos pruebas con 4 criaturas (teníamos comida familiar; en próximos posts, os daré las recetas del conejo al ajillo y conejo adobado,..). Después de desangrarlos, empezamos a despellejarlos, con la inestimable ayuda de una persona que pilotaba, para poder obtener la piel en una sola pieza. Después de obtener las cuatro pieles, se salaron con sal gorda y se tensaron en un marco tipo. De las cuatro piezas obtenidas, solo llegaron 2 hasta nosotros, ya que otras dos se las comieron dos mastines muy majos que tiene mi hermana. De las dos que se salvaron, se rasparon para quitar la mayor parte de la superficie salada y se introdujeron en una cazuela para cocerlos con una gran cantidad de pequeños trozos de roble y taninos. Aprovechamos y cocimos unos cuantos huesos y cráneos que teníamos en el coche. La cocción fue bien, los taninos hicieron su labor y encima los cráneos cogieron un color oscuro muy bonito, en contraposición a la coloración hiperblanca que tomaban las piezas dentales. Lo dejamos reposar, pero se nos fue la mano con esta acción, perdiendo otra de las pieles, quedándonos solamente una, la cual podemos apreciar en las fotos. Estamos practicando, no nos echéis la bronca.    
[13] Opus Cit. Pp.89.
[14] Coger solo la que vayamos a utilizar. La restante la dejamos en alcohol y en el frigorífico para su conservación. Suele durar mucho tiempo.
[15] Opus Cit. Pp. 91
[16] GARCIA HERNANDEZ, Juan I.; (2012): Mea Culpa de un Arqueólogo de Gestión. < https://www.academia.edu/3070711/Mea_Culpa_de_un_Arqueologo_de_Gestion> < http://elfuturodelaarqueologia.blogspot.com.es/2012/04/capitulo-49.html>
[17] http://www.espacioalmargen.blogspot.com.es/
[18] https://www.facebook.com/lamalhablada.salamanca
[19] todsessomosarte@hotmail.com